La semana pasada descubrí un nuevo término del cual desconocía, Open source o código abierto. Se trata de una nueva manera de entender la comercialización, el desarrollo y el uso del software, por esta razón se le suele llamar software libre. Los usuarios y diseñadores pueden aprovechar las diversas ventajas que ofrece el código abierto, pues los primeros utilizan software con las mismas características que el software comercial y los segundos pueden depurar y producir el código para sacarle más partido. Un diseñador puede crear una página web a través de software gratuito, modificando el código fuente, por ejemplo con código fuente de Wordpress. Se crean webs interesantes a bajo coste.
Open Source se basa en 4 grandes principios:
1. Usar con cualquier propósito
2. Aprender y adaptar el programa a tus necesidades
3. Redistribuir copias para todos
4. Publicar mejoras para toda la comunidad
Normalmente utilizamos software libre sin que nos demos cuenta, Firefox es uno de ellos, el navegador utiliza código fuente gratuito. Otro sería Openoffice, una recopilación de programas útiles para la creación de documentos y archivos. Aparentemente tiene las mismas funciones que Microsoft Office Word, lo que facilita su uso, pues la suite ofimática de Word es la más extendida y comercializada.
1 comentario:
Aix, mujercita!
A ti el open source apenas te satisface. Acostumbras a acceder a programario de lujo mediante metodos de usuario casero jajaja
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